HORIZONTES DE REDES NOOSFERICAS

Nada de lo aquí escrito nos pertenece.Si hubiese alguna pertenencia,sería el lazo noetico con el cual se han atado tantas bellas flores de conocimiento que son ofrecidas a la humanidad como un ramillete de noologias...... TOD@ TEXTO/ILUSTRACION ES USAD@ CON FINES DE DIFUNDIR VISIONES SOBRE NUESTRO UNIVERSO Y SUS PENSADORES. SI ALGUIEN SE SIENTE AFECTAD@ POR ELLO, CON SUMA DILIGENCIA RETIRAMOS DE ESTE PORTAL SU APORTE SOBRE EL PARTICULAR EN RAZON DE SU SOLICITUD PERSONAL EN LA EXPLICITUD ESCRITA Y DIRECCIONADA DE SU AFECTACIÓN

martes, 8 de febrero de 2011

gastronomía de Venezuela...

 Arepa

El pan del venezolano

Caracas, 04 May. (Guarda Tinajas).- En la mesa de cada hogar de Venezuela ha estado presente desde épocas ancestrales un alimento cuya forma le rinde homenaje al sol, según Mariano Picón Salas, y que se ha convertido en el pan nuestro de cada día para los venezolanos: la arepa.

El nombre que designa este plato típico del quinto país exportador de petróleo del mundo es Arepa, término de origen indígena, más específicamente de la etnia Cumanagoto, que significa maíz tierno y que también hace referencia a la alimentación en general.

Un periodista venezolano ha dedicado gran parte de su vida profesional a investigar sobre este icono de la alimentación en la llamada Tierra del Arauca vibrador.

Su nombre es Pedro Bereciartu y recientemente relató gran parte de sus experiencias tras la pista del denominado redondo bollo de maíz, durante un foro realizado en la redacción de la Agencia Bolivariana de Noticias (ABN).

De profesión arepólogo

De origen barquisimetano, Bereciartu se dirigió a Caracas a estudiar Comunicación Social en la Universidad Central de Venezuela (UCV). Luego, gracias a una beca de estudios otorgada por la Fundación Gran Mariscal de Ayacucho (Fundayacucho), pudo viajar a Francia para estudiar Cinematografía en la Universidad de la Sorbonne Nouvelle.

Como trabajo final de su maestría le exigieron filmar un documental sobre algún aspecto característico de su país y luego de pasearse por la posibilidad de tocar el tema del Tamunangue, baile típico del estado Lara o de la pelea de gallos, por fin se decidió a investigar sobre la arepa y descubrió que sus orígenes son netamente venezolanos.

Realizó una trilogía de documentales sobre el tema: La arepa, el pan venezolano; Erepa, el pan cumanagoto, y El Arepazo, arepas rellenas.

Venezolanos de maíz

El arepólogo venezolano inició su disertación en ABN al comentar que la arepa venezolana se encuentra unida por su origen, aunque separada por su forma, con la tortilla mejicana, con el bollo colombiano y con la uminta de los chilenos.

    Si el texto del Popol Vuh, libro sagrado de los Mayas, describe el origen de la humanidad a partir del maíz y el escritor Miguel Ángel Asturias llama Hombres de maíz a los americanos, Bereciartu se aventuró a catalogar a los habitantes de Venezuela como hombres y como mujeres de arepa, pues no hay plato, ni nacional ni extranjero, que desplace este alimento del gusto de los herederos de la tierra de Bolívar.

El especialista en arepas explicó que los españoles al venir a América durante la Colonia se sorprendieron al encontrar una civilización que no se alimentara de trigo, de arroz o de millo y descubrieron la gramínea que era la base de la alimentación de los aborígenes, el maíz.

"El maíz es netamente americano, es de estas tierras como lo es el tomate, la yuca y como otros tantos productos que nosotros tenemos en América que le hemos aportado al mundo", señaló.

De la piedra al tostiarepa

En su investigación, Bereciartu conoció la evolución que ha sufrido la preparación de la arepa: desde el uso de la piedra o del pilón para moler el maíz hasta la creación de las harinas precocidas.

"La harina precocida es un invento venezolano de los años 60", comentó y ratificó que la arepa es una creación netamente venezolana.

Aseguró que con el método de la piedra se debían realizar 19 tareas diferentes. Hoy en día existen electrodomésticos que facilitan mucho la tarea.

Sobre el origen de las areperas, el especialista cree que fue una idea de los inmigrantes portugueses que llegaron al país desde la década de los años 50 y crearon un concepto de negocio a partir de lo que hacían las mujeres en las zonas rurales, quienes le hacían arepas rellenas a sus maridos para que estos comieran durante la jornada de trabajo.

La arepa: El "fast food" venezolano

"Yo creo que el venezolano no conoce el origen de lo que se lleva todos los días a su boca. Esto es grave porque uno no defiende lo que no quiere y uno no quiere algo que no conoce", afirmó Bereciartu y recomendó que se instruya a los niños en edad escolar para que conozcan el origen del pan nacional.

Comentó que mientras los mexicanos tienen metido hasta en los tuétanos su tortilla, lo mismo no ocurre con la arepa para los venezolanos.

"Si en México falta un día la tortilla estalla una guerra civil. Si ocurre eso en Venezuela con las harinas precocidas la gente protesta pero no pasa la situación más allá", opinó.

Bereciartu considera la arepa como el "fast food" o como la comida rápida del venezolano, al compararla con lo que representan las hamburguesas para los estadounidenses.

"Ya existen areperas en otros países establecidas por venezolanos que emigraron o por extranjeros que vivieron un tiempo en nuestro país. Ya la arepa se está exportando", aseveró.

Eugenio Osorio Hamel

LA HISTORIA DE LA REINA PEPIADA


Es la arepa más famosa del país. Su receta original dice que es una tostada rellena de pollo guisado y luego horneado, acompañado de lonjas de aguacate y granos de petit pois.

Actualmente, los establecimientos la rellenan con ensalada de gallina, mayonesa y aguacate. Su creador aún está vivo, se llama Heriberto Álvarez, tiene 83 años y es nativo de Las Araujas, una población del estado Trujillo.

'La autoría de la Reina Pepiada no es sólo mía sino también de mis seis hermanos ya fallecidos y, por supuesto, de mi ingeniosa madre: María de los Santos Álvarez, que en paz descanse. Todo comenzó cuando mi papá murió, estando nosotros muy jóvenes. Mi mamá nos trasladó desde Trujillo para Caracas en un camión de estacas. Nos instalamos en la Esquina de Cola e' Pato, en El Guarataro. Allí montamos un negocio de empanadas. Se hicieron tan famosas que la gente se venía desde El Paraíso, expresamente, a probarlas. Como nos fue tan bien pudimos abrir otro local de Maderero a Bucare, cerca de la Plaza Miranda. Mis hermanos y yo le pusimos El Chance. Fue allí donde vendimos las primeras tostadas. Nuestro primer cliente se acercó a las 8:30 de la mañana, en octubre del año 49. Nos preguntó: 'Muchachos, ¿qué es eso de tostadas?'. Le explicamos que así se le decía a la arepa rellenita en Trujillo. Pidió una de queso de mano y se la devoró gustosamente.

En ese momento se llamaba Alfredo Sánchez, vivía a una cuadra del negocio y era un aficionado al canto. Después se convirtió en Alfredo Sadel. Imagínese qué suerte nos dio ese señor de ser el primero que se comiera una de nuestras arepas'.

El origen del nombre
'Con el tiempo fuimos creciendo y, en el año 55, Época gloriosa del General Marcos Pérez Jiménez, abrimos Los Hermanos Álvarez en La Gran Avenida, la que comunica Plaza Venezuela con Sabana Grande. Estábamos en un punto estratégico, porque teníamos al lado la hermosa floristería de las hermanas Belloso y un negocio muy visitado que se llamaba Todo París. Nuestros clientes fijos eran Aquiles Nazoa, Oscar Yanes, Billo Frómeta y Abelardo Raidi, entre otros. Ese mismo año, la señorita Susana Duijm ganó el Miss Mundo. Para rendirle homenaje, vestimos de reina a una de nuestras sobrinas, que tenía apenas 12 años. La sentamos como en un altarcito para que la gente la viera en el establecimiento. Entonces pasó un señor y nos preguntó por qué teníamos
a esa niña allí. Le explicamos que era un homenaje a la nueva soberana de la belleza. Nos dijo: '¡Pero si yo soy el papá de Susana! Se las voy a traer para acá'. Y así fue. Un viernes, como a las 10:00 de la noche, se apareció la señorita Susana con su papá. Yo le di una tostada en sus manos y le dije: 'Mire, esta tostadita se la preparó mi mamá especialmente y se va a llamar La Reina, así como lo es usted'. Ella me dijo: 'Muchas gracias, mijo', y se la comió con un juguito. Y como en esa época, a las mujeres de buenas curvas, así como Susana, se les llamaba 'pepiadas', le pusimos ese apellido a la arepa.

Mantuvimos el negocio hasta el año 68. Otro que nos promocionó incondicionalmente fue Renny Ottolina. ¡Cómo se portó ese señor con nosotros!'.

Sobre la preparación original
'Se amasaba muy bien la mezcla y se le incorporaba una cucharadita de mantequilla. En aquella época se conseguía la marca Alfa, que era muy buena y salía barata. Así, la masa adquiría una textura más flexible y perdurable. Una vez que se les daba forma, las arepas iban al budare por cinco minutos, luego al fogón hasta que se les levantaba la conchita, lo cual indicaba que estaban listas. El relleno, originalmente, es un pollo macerado: mi mamá primero lo sancochaba y le ponía bastante aliño y lo dejaba hasta el día siguiente en la nevera. Después lo horneaba y posteriormente era que le sacaba las lonjitas para rellenar la arepa. Una ocurrencia de ella fue ponerle aguacate. Y como en el negocio teníamos petit pois, porque a la gente le encantaba, entonces los añadimos a la arepa'.

Alrededor del reinado
'Después de La Reina vino otra arepa que también se hizo famosa. Era La Multisápida. La llamamos así porque Rómulo Betancourt hablaba, en los cincuenta, del surgimiento de una política multisápida. Queríamos hacer alusión a algo que estaba sobre el tapete. La nuestra tenía un poquito de queso, otro poquito de chicharrón, otro de pollo… Bien bonita, eso sí. No menos famosa fue La Prohibitiva. Era una tostada rellena de caviar, un invento de uno de mis hermanos como estrategia de ventas. La Reina costaba un bolívar y la gente se quejaba de que era muy cara, ya que las demás no pasaban
de real y medio o real y cuartillo.

Entonces pusimos La Prohibitiva a 27 bolívares para que La Reina luciera mucho más barata. Pero el venezolano siempre ha sido muy pantallero. Nunca faltaba alguno que llegara y dijera a todo gañote: '¡Álvarez, dame una prohibitiva!', y en secreto te susurraba: 'de queso de mano'. Todo era para aparentar que podían pagar una cosa que nunca se vendió. Otro de nuestros productos principales lo llamamos 'Sistema Nervioso'. No era más que el mondongo. Le pusimos así por un borrachito maracucho que siempre nos visitaba y pedía: 'Dame un nervioso'. Según él, era lo único que le quitaba el malestar. Pero el cliente, quizás, más importante que tuvimos fue el señor Luís Caballero Mejías. Una noche se presentó con una bolsita de harina y nos dijo: 'Muchachos yo preparé esta mezcla a ver si las arepas me quedan igual a las de ustedes'. Nos pidió que la probáramos y nos explicó que eran dos kilos de maíz, primero sancochados, luego molidos y posteriormente secados. Nos fue muy bien con esa mezcla. Y cómo no, si lo que nos estaba dando era la fórmula de la harina pan. Lo demás es historia'.

Reyna Pepiada

La gastronomía de Venezuela es realmente extensa y extraordinaria. Uno de esos elementos que la conforman es el Casabe de yuca que es un rico alimento muy tradicional y popular en Venezuela. El ingrediente básico de este alimento es la yuca que es tremendamente cultivada y popular. Desde luego el sabor que tiene es extraordinario y suele gustar mucho a los turistas.

casabe.jpg

Es realmente un alimento muy antiguo ya que eran los indígenas arahuacos los que empezaron a confeccionar el casabe a partir de la cáscara de la yuca y poco a poco se fue perfeccionando la técnica. Los indígenas hacían este alimento con materiales muy rudimentarios como pueden imaginar pero a partir de ellos es cuando se empezó a hacer tradicional este alimento tan rico.

Hoy se hace este alimento con más tecnología que con la que se hacía entonces ya que por ejemplo las prensas que se usan hoy son mecanizadas y es mucho más fácil y rápido poder hacerlo e incluso se pueden hacer varias tortas al mismo tiempo. Este alimento se puede y se debe consumir con otros ya que su sabor sigue inalterable.

El turista lo podrá encontrar en muchos lugares ya que es algo muy tradicional y propio de Venezuela. Los turistas cuando lo prueban se quedan encantados y su sabor no se olvida fácilmente.

 



--
virgilio